martes, 12 de septiembre de 2023

28. “LA MANSEDUMBRE, ADORNO DEL ALMA”


Porque Jehová tiene contentamiento en su pueblo; Hermoseará a los humildes con la salvación. (Salmo 149:4).

El Más Precioso Fruto De La Santificación Es La Gracia De La Mansedumbre.

 Cuando esta gracia preside en el alma, la disposición es modelada por su influencia. Hay un constante espera en Dios, y una sumisión a la voluntad divina.

La comprensión capta toda verdad divina, y la voluntad se inclina ante todo precepto de Dios, sin dudar ni murmurar. La verdadera mansedumbre suaviza y subyuga el corazón, y adecua la mente a la palabra injertada. Coloca los pensamientos en obediencia a Jesucristo.

Abre el corazón a la Palabra de Dios, como fue abierto el corazón de Lidia. Nos coloca, junto con María, como personas que aprenden a los pies de Jesús. "Encaminará a los humildes por el juicio, y enseñará a los mansos su carrera" (Salmo 25:9).

El Lenguaje de la mansedumbre nunca es el de la jactancia. Como el niño Samuel, los mansos elevan el ruego: "Habla, porque tu siervo oye" (1Samuel 3:10)...

La mansedumbre en la escuela de Cristo es uno de los frutos destacados del Espíritu. Es una gracia obrada por el Espíritu Santo como santificador, y capacita a su poseedor para dominar en todo tiempo su temperamento duro e impetuoso.

Cuando La Gracia De La Humildad es practicada por los que naturalmente son de disposición áspera, Y Precipitada, harán los más fervientes esfuerzos para subyugar su desdichado temperamento.

Todos los días obtendrán el dominio propio, hasta que resulte, vencido aquello que no es amable ni semejante a Cristo.

Se asimilan al Modelo divino, hasta que pueden obedecer la orden inspirada: "Todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse" (Santiago 1:19)...

La Mansedumbre Es El Adorno Interior, Que Dios Estima De Gran Valor.

El Apóstol Habla de esto diciendo que es más valioso que el oro, o perlas, o atavíos costosos. En Tanto que el ornamento exterior hermosea solamente el cuerpo mortal, el adorno de la mansedumbre embellece el alma, y vincula al hombre finito con el Dios infinito.

Este es el ornamento que Dios mismo escoge. Aquel que embelleció los cielos con los orbes de luz, ha prometido, por medio del mismo Espíritu, que "hermoseará a los humildes con la salvación".

Los Ángeles Del Cielo Registraran como mejor adornados a los que se vistan del Señor Jesucristo, y anden con mansedumbre y humildad.

Al cristiano se le presenta la posibilidad de realizar grandes conquistas. Puede siempre estar ascendiendo a mayores conquistas. -La edificación del carácter, págs. 17-20. RJ 256/EGW/MHP 257

AUDIO. https://www.youtube.com/watch?v=gf2kxrGkAkk&list=PLtrFh-HO7ogB0b9ZH0YMA5EYtDsepZwEC&index=7&pp=gAQBiAQBsAQB


27. “DIOS DA GRACIA A LOS QUE CREEN SU PALABRA”

Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan. Hebreos 11:6.

Se me ha mostrado que muchos tienen ideas confusas con respeto a la conversión. A menudo han oído repetir desde el púlpito las frases: “Es necesario nacer otra vez”. “Deben tener un nuevo corazón”. Estas expresiones los han preocupado. No podían comprender el plan de salvación.

Muchos han marchado a los tumbos hacia la ruina debido a las erróneas doctrinas enseñadas por algunos pastores concernientes al cambio que ocurre en la conversión.

Algunos han vivido en la tristeza durante muchos años, esperando alguna señalada evidencia de que eran aceptados por Dios.

Se han separado en gran medida del mundo, y hallan placer en asociarse con el pueblo de Dios; sin embargo no osan profesar a Cristo, porque temen que sería presunción decir que son hijos de Dios.

Están esperando el cambio extraordinario que han sido inducidos a creer que está relacionado con la conversión.

Después de un tiempo, algunos de éstos reciben evidencia de su aceptación por parte de Dios, y entonces son inducidos a identificarse con su pueblo. Ellos hacen datar su conversión desde ese tiempo. Pero se me ha mostrado que fueron adoptados en la familia de Dios antes de ese tiempo. Dios los aceptó cuando sintieron dolor por el pecado, y habiendo perdido su deseo por los placeres del mundo, resolvieron buscar a Dios fervientemente.

Pero al no comprender la sencillez del plan de salvación, perdieron muchos privilegios y bendiciones que podrían haber reclamado si solamente hubieran creído, cuando por primera vez se volvieron a Dios, Que Él los había aceptado.

Otros caen en un error aún más peligroso. Son gobernados por los impulsos. Sus simpatías se despiertan y consideran esta irrupción de sentimientos como una evidencia de que son aceptados por Dios y están convertidos. Pero los principios de su vida no han cambiado.

Las evidencias de una genuina obra de gracia en el corazón han de fundarse, no en los sentimientos, sino en su vida. “Por sus frutos”, dijo Cristo, “los conocerán”...

La obra de la gracia en el corazón no es una obra instantánea. Se efectúa por medio de una vigilancia continua y cotidiana y creyendo en las promesas de Dios.

A la persona arrepentida y creyente, que alberga fe y anhela con fervor la gracia renovadora de Cristo, Dios no la devolverá vacía. Le dará gracia. Y los ángeles ministradores la ayudarán mientras persevera en sus esfuerzos para avanzar. 

El Evangelismo, 211,212. [264]

AUDIO. https://www.youtube.com/watch?v=n9w6DWHwLmU&list=PLVsLdOIe7sVth_iTmO5piM9oND-0LC-Hr&index=13&pp=gAQBiAQBsAQB

 

01. REFLEXIONES 01-30/ENLACES

01. LA VANIDAD AUMENTA POR LA PEREZA Y AVARICIA.  https://educacionespiritualmhp.blogspot.com/2020/08/01-la-vanidad-aumenta-por-la-pereza-y....